17 Jan 2013

Y todo por una camisa de Pink Floyd

Todo ha sido completamente normal, hasta que llegó la hora de lengua, en la que la profe no vino.
Yo me había quitado la chaqueta. Por lo tanto, se veía "Pink Floyd" escrito en la parte de detrás, a parte de lo de delante.
Me giré para hablar con uno de mi clase. En ese instante, el profesor de guardia, se acercó a mí y me dijo muy serio: "No te dejo girarte hacia detrás más, si no me dices lo integrantes del grupo de tu camisa".
Entonces se los dije. Luego me dijo que lo repitiera. Y lo hice. Se fue.
Al rato volvió y me preguntó qué cuál había sido el álbum más famoso de Pink Floyd. Le contesté:" The Wall y The Dark side of the moon". Después de eso me hizo más preguntas. Demostré todos mis conocimientos acerca de Pink Floyd. Como una buena fan. Una fan de posters.
A la siguiente hora, me tocó plástica. Por fin había venido el profesor, ya que había estado de baja. Entramos unos pocos y nos dijo: '¿qué tal?'. Yo contesté: Estoy viva.
En ese momento vio mi camisa. Y me dijo: ¡PINK FLOYD! ¿Te gusta Pink Floyd? Eso es la refracción de la luz, ¿eh? Luego, me preguntó sobre cuál era mi disco favorito. Respondí "Wish You Were Here".
A raíz de eso, se pasó la mitad de clase hablando de Pink Floyd, de sus canciones. Me sacó delante de todo y dijo: - ¿Ven su camisa? Es ella sale la refracción de la luz.
Finalmente, me dijo que no debería decir "estoy viva" que solo tengo 14 años.
Me quedé aturdida. Sobre todo por una frase que dijo. "¿Por qué vas a dejar de enamorarte por una vez que salió mal?". No iba dirigida a mí. Pero me sentí aludida.
En ese monólogo donde habló de la refracción de la luz y de muchas cosas más de miró, y me dijo: Te voy a putear. Yo los vi en directo. Vi a Roger Waters en directo. 
Yo casi muero de amor/envidia.

14 Jan 2013

Puedes enamorarte...

Pero una vez que lo hagas, sufrirás y no podrás hacer nada por evitarlo. Es tu propia condena. Puedes arriesgar y ganar. Puede que tengas suerte, y esa persona que te hace reír, luego no te haga llorar. Pero al menos yo, no la he probado. Quizás sea mi condena. Estar a atada al amor de por vida. Quien sabe. Al fin y al cabo solo soy una estúpida con un corazón marchito. Una puta estúpida. Una maldita inconsciente. 

11 Jan 2013

- ¿Estás bien?

+ Estoy viva.
     Así es como van a empezar y van a ser todas mis conversaciones de ahora en adelante.
¿Razón? Ruptura. OTRA PUTA VEZ.
No sé si alguna vez llegué a comentar que iba a negarme a enamorar. Pues de eso va la historia.
Rompí esa promesa. Maldita hora en la que la rompí.

Ahora tengo ganas de cerrar los ojos.
Y no volver a abrirlos.
Tengo ganas de respirar.
Y soltar mi último suspiro.
Tengo ganas de sentir.
Que ya no siento.
Tengo ganas callar.
Y sellar mi corazón.
Y no abrirlo jamás.

De repente, mientras escribo esto, veo una imagen. No, no es con él. Pero me refleja a mí. A mis ojos con lágrimas. A mi dolor.
Él sí que hizo una promesa. Era no estar con nadie hasta su cumpleaños. Pero empezamos con una relación no relación. Y moló. Moló mucho.
Luego fue su cumple. El 23 de diciembre. Empezamos. Fue todo bien. Todo era perfecto.
¿Recordáis cuando dije que nada era perfecto?
Al empezar las clases, me dijo que no sentía lo mismo. Eso fue el-principio-del-fin.
Hoy, a la salida del instituto me lo dijo.
Ya está.
Se acabó.
¿Y ahora qué pasa conmigo? ¿Qué voy a hacer con todo lo que siento?
Sin embargo, eso no es lo peor... Lo peor, es pensar en mi próximo error. ¿Qué por qué digo esto? Porque me conozco. Mi promesa tiene tanto valor como la mierda de una vaca. No la podré cumplir. Porque soy así de dependiente. Volveré a caer en una trampa. Una y otra vez. Hasta que ya no pueda más.
¿cuál será mi próximo error?